La cabeza de Sur América. La pequeña Venecia. Conocida por su amazónica selva y por su femenina belleza. La baña el agua del Caribe y la arropan las montañas de los Andes. Altiva con sus Llanos, cubierta de un cielo azul y de un sol que no fallan. Con olor a lluvia y orquídeas. Con un puente poderoso que pasa por encima de un lago esplendoroso. Un desierto, los Médanos; el roedor más grande, chigüire y serpiente que asusta, anaconda. Venezuela dueña de el Salto Ángel, el más alto del mundo y de Roraima, la primera roca que formó nuestro planeta. Esta poseída por Orinoco, su río hermoso.
Venezuela tierra de inmigrantes, indios, mulatos, blancos y negros; raza mestiza, bellísima y fortísima. Patria del Libertador de América. Fue el primer país del Sur en proclamar su independencia. Tierra que ha parido jugadores de béisbol para inspirar las Grandes Ligas. Dueña de corales y de su oro negro, el petróleo. Donde los sueños y las esperanzas no tienen límite; donde la amabilidad y humildad se aprenden desde pequeño. Donde están presentes los mejores atardeceres. Está representada por el Araguaney, el más amarillo y hermoso y también por el tucán más afectuoso.
Venezuela tiene los aguacates más grandes y sabrosos; una chicha y jugo de papelón que endulzan a cualquiera. Allí se bebe jugo de parchita, lechosa y tamarindo; ron Cacique y Santa Teresa. También cerveza Polar y se come Harina Pan. Posee el sabor de un cacao maravilloso y de un café que despierta y consiente a los venezolanos. Su plato criollo, el pabellón y su arepa, reconocida como el mejor desayuno del mundo. Sus tequeños que no dejan de faltar. Hallacas y panes de jamón indican el final del año. No olvidar la suculenta carne en vara, el lomito y pollo asado; los golfeados, las cachapas, el queso blanco, de telita y Guayanés.
Venezuela: arpa, cuatro y maracas. País de música, bailes y sabor. Tambores, Joropo, Gaitas y Vals. Orquesta Sinfónica orgullosa. Merengue, Salsa y Reguetón, ritmos de son. Tenemos los bailes regionales: Carite, Sebucán, la Llora y los Diablos danzantes. También los tradicionales: las Turas, el Pájaro Guarandol, la Burriquita y el Tamunangue. Haciéndonos vibrar, el Golpe Tocuyano y el Calipso de El Callao. El Mare Mare, Chiriguare, El Fandanguillo, Locos y Locainas y también San Pascual bailón. Todos ellos alebrestan el corazón.
Venezuela, donde todo significa fiesta, piñata, cotillón, ‘Hora loca’ y calorón. Trabajo, familia y amigos la encabezan. Pero sigue la fiesta, la parranda, la rumba, el bochinche, el barullo. Venezuela, cuna de Dios y de todos. Venezuela tricolor, siempre te llevamos en el corazón y te pedimos la bendición. Mirando al horizonte te recordamos y extrañamos. Vivimos desde lejos lo que es sentirte, lo que es Sentir Venezuela.